27 agosto 2009

La derrota de Quintilio Varo

Publicado en La Vanguardia
Rafael Poch

Hace dos mil años, en el año 9 de nuestra era, hubo una batalla cerca de Osnabrück, en el noroeste de Alemania. Tres legiones romanas al frente de Publio Quintilio Varo, unos 15.000 hombres, fueron exterminadas por un caudillo germano llamado Arminio. Fue la famosa derrota de Varo (clades Variana) en el bosque de Teutoburgo, una de las mayores del imperio, desde la de Craso ante los partos en el 53 a.C. y la de Antonio en el 36 a.C.

Muchos siglos después, Arminio fue convertido por el nacionalismo germano en mito nacional. Transformado en "Hermann", el Viriato o Don Pelayo alemán, su gesta, evocada por Lutero en el pulso con el catolicismo romano, inspiró la lucha contra Napoleón, acompañó la guerra franco-prusiana de 1870 y la unificación bismarckiana, y se mantuvo hasta el nazismo. Hoy, Alemania dedica al bimilenario del evento una macro exposición dotada con doce millones de euros, que ha sido inaugurada por la canciller Angela Merkel. La exposición, hasta el 25 de octubre, se celebra en tres escenarios, el atribuido a la batalla, en el paraje de Kalkriese, donde hay un museo permanente, el de la principal guarnición romana al este del Rin, en Haltern am See, y en Detmold, el lugar donde se encuentra el mayor monumento del XIX al mitificado Hermann. La exposición se llama; "Imperium-Konflikt-Mythos", y, además de la propia batalla, examina críticamente las relaciones de romanos y germanos, y el mito de Hermann

UNA MASACRE POCO EVOCADA
La aniquilación de más de diez mil legionarios al final de la época de Augusto, en el apogeo del Imperio, no fue guión que entusiasmara a los clásicos latinos. Sus crónicas evocan de pasada tan desagradable asunto. Tácito, que escribe un siglo después, sólo dedica en sus "Anales" una breve referencia a la batalla, narrando el regreso a su escenario de una fuerza militar al mando de Germanicus, seis años después de los hechos.

"Acompañados de algunos supervivientes del desastre visitaron el lugar, con sus horribles visiones y asociaciones. En el centro del campo estaban los huesos blanqueados de los soldados, cada uno en el lugar donde había caído defendiendo su posición o huyendo, esparcidos por el suelo o apilados. Cerca había restos de armas, huesos de caballos y también cabezas humanas, clavadas en los troncos de los árboles. En las arboledas cercanas estaban los bárbaros altares en los que tribunos y centuriones habían sido sacrificados". En ese ambiente, los soldados de Germanicus enterraron los restos, "sin saber si se trataba de propios o extraños", escribe Tácito.
Unos veinte años después de los hechos, Velleius Paterculus dedica también unas líneas al suceso citando a testigos presenciales. En su "Historia Romana", Velleius promete abundar en el tema en una obra posterior, pero, o no lo cumple, o esa obra se perdió, explica la arqueóloga Heidrun Derks, que lleva nueve años excavando aquí. La principal y mejor fuente sobre la batalla es Cassius Dio Cocceianus que escribió en el siglo III y utiliza fuentes escritas, hoy perdidas, de coetáneos. Este autor describe con claridad una enorme y mortífera emboscada:

"Estalló una tormenta y empezó a llover. El suelo estaba embarrado y resbaladizo, cada paso era un peligro. Los árboles se rompían y los árboles caídos complicaban el avance. En tal situación, les cercaron los bárbaros que se conocían todos los atajos. Surgieron inesperadamente de todas partes, entre las mayores espesuras del bosque".

Con ayuda de estas crónicas y cierta dosis de azar, como suele ocurrir en esta ciencia, la arqueología ha reconstruido las circunstancias y la más que probable localización de aquel drama en Kalkriese, veinte kilómetros al norte de Osnabrück y a unos ochenta de la frontera holandesa. El lugar es hoy un espacio boscoso tomado por los autobuses de jubilados y colegios, que lo visitan en multitud, pero no cuesta imaginarse la escena: bajo una tormenta otoñal, un gran ejército en el camino de regreso a sus cuarteles de invierno, ajeno al peligro e inducido por una traición a pasar por un largo y en algunos lugares angosto paso, entre una montaña, al sur, y una gran zona pantanosa, al norte. Los germanos habían preparado empalizadas y baluartes que dominaban el lugar.

Setenta años antes, César había establecido el Rin como frontera oriental del Imperio pero medio siglo después una docena de establecimientos y algunos grandes campamentos al este del río, confirmados por la arqueología, daban fe de los planes de creación de una nueva provincia, más allá de aquel límite. El encargado de organizarla era Varo. El Cónsul era una persona madura y experimentada, tenía más de 50 años al morir en el desastre. Era un hombre de crisis, a quien Augusto había encomendado asuntos difíciles en Palestina y Siria, donde crucificó a 2000 rebeldes, lo que sugiere que se conocía la dificultad de su nueva empresa. Su derrota puso fin al proyecto de la nueva provincia. Los romanos siguieron paseándose al este del Rin -sus exploraciones llegaron hasta el Elba- pero ya sin intención de asentarse.

Arminio /Hermann era hijo de un jefe querusco y había combatido en el ejército romano, al que conocía bien. Tenía 26 años. Dirigía una tropa auxiliar germana y había sido elevado al título de caballero. Era un aliado y amigo de Varo. El Cónsul recibió confidencias sobre su planeada traición pero no las creyó. Fue Arminio quien llevó al ejército romano a la trampa del bosque de Teutoburgo, sugirió una variación en la ruta, y desapareció del convoy con una excusa.

"Sabía por experiencia que al ejército romano no se le podía vencer en campo abierto y también que los legionarios en marcha, cargando unos 40 kilos, necesitaban algunos instantes para ponerse el equipo, desanudar el casco que llevaban colgando bajo el tórax, desarmar el petate de la lanza, preparar las armas, etc.", explica Dersk. Sin sus protecciones de hierro, los romanos estaban mucho más a la par con los germanos, que eran más ágiles por carecer de impedimenta, y en aquella ratonera no había espacio para organizar formaciones de combate. Según Cassius Dio, la matanza duró cuatro días y tuvo varios escenarios. La arqueología lo ha confirmado encontrando 5000 muestras romanas, incluidas 1600 monedas, armas y una máscara de caballero que es la joya de la exposición y emblema de la batalla, extendidas a lo largo de 11.000 metros cuadrados excavados y 30 kilómetros cuadrados examinados.

Muy pocos escaparon. Varo, herido se suicidó. Su cabeza fue enviada por Arminio a Marobod, rey de los marcomanos, con una oferta de alianza contra Roma, pero éste, temiendo la ira romana, la envió a Roma donde fue finalmente enterrada en el panteón familiar con todos los honores.

"Fue una derrota enorme, sicológicamente tanto más dura e inesperada si se piensa que los romanos llevaban treinta años guerreando en Germania y creían que el capítulo militar ya había pasado", dice la arqueóloga. La pérdida de las águilas de las tres legiones aniquiladas, la XVII, XVIII y XIX, era la mayor deshonra. Los números de esas legiones no se restablecieron en el ejército de Augusto, que contaba con unos 300.000 hombres en todo el Imperio, incluidas tropas de apoyo. La búsqueda de las águilas comenzó al año siguiente. Seis años después, Germanicus recuperó dos de ellas y tomó presa a Thusnelda, la mujer de Arminio, lo que enriqueció el mito romántico de Hermann. El propio caudillo germano fue asesinado cuatro años más tarde, en el año 19, por sus propios parientes.

La leyenda de Hermann aparece a partir del siglo XVI. Fue alimentada por el propio Lutero quien dijo que si hubiera sido poeta le habría gustado loar a Hermann. La historia contenía, "buena sustancia para óperas barrocas y novelas", dice Derks. Alcanzó hasta el nazismo. En 1934, la obra del romántico Henrich von Kleist "Die Hermannschalcht" fue representada en 150 teatros del país y celebrada como quintaesencia del teatro nacional-socialista.

MOMMSEN Y UN MAYOR INGLÉS
Desde el siglo XVII, los campesinos de esta región encontraban en sus campos monedas romanas. En el XIX Theodor Mommsen (1817-1903), el sabio universal autor de una Historia de Roma que mereció el Premio Nóbel de Literatura en 1902, las hizo examinar, estableció la relación temporal con la batalla y llegó a la idea de que el lugar de Kalkriese, "entre una montaña y un pantano", podía haber sido su escenario. Su hipótesis quedó cubierta por otros setecientos lugares de Alemania que se atribuían, con más voluntad que fundamento, el honor de haber sido el escenario de tan patriótica batalla. Fue un mayor del ejército británico estacionado en Alemania y destinado en Osnabrück, llamado Tony Clunn, quien, en 1987, armado de un detector de metales, la hipótesis de Mommsen y un mapa con los hallazgos de monedas en el lugar, levantó la liebre. Clunn encontró 160 monedas juntas y tres piedras del tamaño de una almendra con cáscara, que eran proyectiles de honda como los usados en el ejército. Veinte años de excavaciones arrancan de esos hallazgos.

"Al principio pensamos que podía tratarse de un campamento", explica Susanne Wilbers-Rost arqueóloga en el lugar desde 1990. Los legionarios ganaban en aquella época unos 225 denarios al año y muchos llevaban consigo sus ahorros, lo que explica la abundancia de monedas perdidas en el caos de la batalla y no saqueadas por los vencedores. Luego se empezaron a encontrar restos de armas, huesos hombres y animales, restos de corazas, indicios de un parapeto. De los dientes de una mula se dedujo que había estado recientemente en la zona mediterránea. Al final se puede concluir que, "lo de aquí no fue una simple escaramuza, sino una batalla brutal e importante" y que, "en ningún otro lugar se han encontrado tales indicios", lo que convierte a Kalkriese en el escenario más plausible.

EL LIMES ROMANO EN EL SIGLO III
En siglo III dC saqueadores germanos penetraron en el Imperio en diversos ataques. Durante mucho tiempo se consideró que las líneas fronterizas fortificadas del Limes en el alto Rin y en el curso superior del Danubio, habían caído en un súbito y masivo ataque germano, que eliminó toda vida romana a lo largo de la frontera. Hoy esa teoría debe ser matizada. En el 213 dC bandas germanas atacaron la frontera por primera vez. El ejército romano contraatacó y se restableció la paz por veinte años. Entonces, los Alamanes penetraron en el Imperio, aprovechando que muchas tropas de aquella frontera habían sido enviadas a otras zonas bélicas del Imperio dejando desprotegida la línea. Como consecuencia de nuevas retiradas, se produjeron nuevas invasiones que sembraron inseguridad en las provincias occidentales. Crisis económicas y luchas por el poder entre emperadores rivales, intensificaron la crisis del Imperio. La situación no se estabilizó hasta los años ochenta, aunque para entonces los romanos ya habían abandonado los territorios imperiales al este del Rin. El objetivo de las incursiones germanas no era la conquista, sino el botín, con el que los caudillos mantenían unida a su tropa. Una lógica, aun actual, animaba el impulso: poder para hacer la guerra, y hacer la guerra para mantener, o aumentar, ese poder.

24 agosto 2009

El chalé de 600 m2 del gobernador romano

Publicado en La Nueva España
M. S. Marqués

Veinte siglos después de los episodios bélicos protagonizados en Hispania, la huella de Roma está cada día más presente en Asturias. Los vestigios del proceso romanizador vivido por los pueblos astures a lo largo del siglo I no dejan de sorprender con testimonios que permiten reconstruir un período de la historia no demasiado conocido en nuestro territorio.

Lugar privilegiado para comprender las relaciones con los pueblos conquistados y apreciar la transformación de esos territorios es, sin duda alguna, el Chao Samartín, en Grandas de Salime. Asentado en los terrenos aledaños al pueblo conocido con el nombre de Castro -ya un dato ilustrativo-, el yacimiento se ha convertido en un muestrario de materiales del máximo interés. Tras casi dos décadas de campañas arqueológicas, sus ruinas hablan por sí solas de la vida y costumbres de los primeros astures y de unas formas de organización que no van a desaparecer, sino a enriquecerse tras el sometimiento a Roma.

El Chao Samartín es, en la actualidad, el mejor escenario de Asturias para conocer esa transformación, y a ello contribuye sobremanera la lujosa mansión romana (domus) en la que el equipo coordinado por Ángel Villa viene trabajando en las últimas campañas con extraordinarios resultados. La «domus», como es conocida entre los miembros del equipo, permite desarrollar una lectura más precisa y detallada de la organización económica y social del poblado en el siglo primero de nuestra era.

Pero si el Chao es hoy referencia destacada es, en parte, gracias a la curiosidad de Pepe el Ferreiro y a la generosidad de vecinos como Manuel Barcia. Fueron los primeros en comprender la importancia de unos terrenos en los que era habitual localizar restos de cerámica durante las labores agrícolas. Con el tiempo llegaría el interés de las administraciones local y regional, patrocinadoras de la investigación, en la que es pilar destacado el equipo de Ángel Villa, con Rubén Montes, Susana Hevia, Olga Gago y Belén Madariaga, entre otros.

Todos ellos, junto con los estudiantes que cada año se suman a la excavación, y apoyados por la labor indispensable de los operarios del Ayuntamiento de Grandas, están haciendo realidad un sueño impensable hace tan sólo un lustro. Poco a poco han ido rescatando de entre las ruinas del propio derrumbe más de la mitad de la lujosa casa romana. Vertebrada en torno a un patio columnado al que se abren la mayor parte de las estancias, la «domus» fue, a juzgar por los restos conservados, la residencia del representante del poder en la zona. En este sentido, el Chao Samartín ofrece abundantes testimonios de su condición de centro administrativo del que dependía la explotación aurífera de la zona. La estructura de la casa y la calidad de los materiales desvelan el alto rango de los inquilinos que la habitaron.

En las últimas semanas, los arqueólogos han conseguido destapar lo que sería la sala dedicada a la representación social, una estancia que se ajusta a los cánones romanos para este tipo de habitaciones y que contó en su día con paredes decoradas con pinturas y molduras de gran pericia técnica. A diferencia del resto de las estancias, lució umbral de granito y dos jambas monumentales que la abrían al atrio. A la derecha, una escalera interior da acceso a la planta superior.

Pero si algo tiene verdadero carácter romano es el patio columnado, donde se conservan los grandes sillares de granito que sirvieron para enlosar el piso. Bajo éstos, una línea de lajas de pizarra cubre la canalización que transportaba el agua de la lluvia hasta algún depósito en el exterior. El patio tuvo diez columnas, de las que se conservan tres fustes, dos capiteles y seis basas, todos ellos de granito de origen gallego. En las casas romanas el atrio era un espacio fundamental pensado para recibir la luz y airear los cuartos interiores. Hoy, a pesar de encontrarse en ruinas, sigue siendo la parte más llamativa de cuanto ha conseguido sobrevivir a los casi dos mil años transcurridos desde que fue levantado como símbolo de poder en la nueva «civitas» romana.

Las columnas dan prestancia y lucimiento a los restos arqueológicos y, tras la sorpresa, transportan la imaginación de quien las observa a lugares sin duda ajenos al occidente de Asturias. Muy cerca del patio se ha conseguido mantener casi intacta la cocina con horno y lareira. Allí se preparaban los manjares que formaban parte de la dieta alimenticia de la familia.

El reportaje sigue aquí

Nuevos hallazgos en la Vega Baja

Publicado en La Rioja.com
J.V. Muñoz Lacuna

Contratos de trabajo, inventarios de objetos, ejercicios escolares y operaciones de ventas y compras. Son algunas de las actividades que los visigodos plasmaban en tablillas de pizarra.
También sabían cómo construir depósitos de agua impermeables e importaban cerámica del África bizantina. Todo ello forma parte de las últimas investigaciones realizadas en torno al yacimiento arqueológico de la Vega Baja de Toledo, en el que trabajan más de cien personas. Un yacimiento que está arrojando datos sobre una época histórica poco conocida.

Situado junto al casco histórico de Toledo, un proyecto urbanístico de 1.300 viviendas lo amenazó a principios de este siglo. Finalmente, la presión de instituciones defensoras del patrimonio evitó que las excavadoras destrozaran buena parte de la antigua capital del Reino Visigodo. «Cuando toda la superficie de la Vega Baja esté excavada, y ya tenemos 25 hectáreas acotadas, tendremos una ciudad entera con estructuras de calles, viviendas, edificios públicos y zonas productivas. Es un caso único en Europa con esa extensión», apunta Diego Peris, director de la empresa pública 'Toletum Visigodo', responsable del yacimiento.

En esta campaña se ha confirmado que la principal ocupación tuvo lugar en las primeras décadas del siglo VIII d.C.

La imagen proviene de Toletum Visigodo, donde encontrarás más información.

22 agosto 2009

Un rinoceronte en Triacastela

Publicado en El País
Pablo Vazquez

Los rinocerontes campaban por la montaña lucense. Pero hace 32.000 años. Y sus restos, cazados por los Homo sapiens, han aparecido en la cueva de Eirós, en Triacastela. Ninguna otra caverna posee tres niveles documentados de edades tan diferentes (uno del Paleolítico Medio y dos de Paleolítico Superior) concentrados en sólo 11 metros cuadrados. La gruta, en la que trabajan arqueólogos de la Universidad de Santiago junto a personal de la Universidad Rovira Virgill y voluntarios de Cantabria y Burgos, fue sometida a dos catas que destaparon un nuevo nivel desconocido, correspondiente al Paleolítico Superior. Este fragmento tiene unos 30.000 años de antigüedad y recoge los primeros registros de actividad del Homo sapiens. El nivel inmediatamente anterior data de hace 84.000 años.

"En muy pocos lugares de toda Europa", defiende el arqueólogo director de la excavación, Arturo de Lombera, "se puede comparar en un mismo paraje cómo se gestionaba el territorio y cómo evolucionaban tecnológicamente y conductualmente los humanos". Tampoco existe ninguna otra gruta documentada de entre 30.000 y 17.000 años. Este silencio arqueológico puede deberse a falta de investigación o estar relacionada con los períodos de glaciaciones, según argumenta el corresponsable de Eirós, Xosé Pedro Rodríguez.

Desde la gruta de Eirós puede hacerse el recorrido que va de un Neanderthal característico del Paleolítico Medio, hace 84.000 años, a un primitivo Homo sapiens, propio del Paleolítico Superior, hace 32.000 o 30.000 años. En los 11 metros cuadrados de Eirós se han encontrado herramientas líticas en cuarzo y las más evolucionadas de cristal de roca o sílex, utilizadas en el Paleolítico Superior. El Neanderthal y el Homo sapiens también han dejado restos de los animales que cazaban y consumían, entre ellos el rinoceronte, como ciervos, corzos, rebecos, cabras o incluso vestigios de animales extintos como el oso de las cavernas.

Según De Lombera, sólo la cueva da Galiña (Castroverde), donde también se han documentado rinocerontes o hienas, y la cueva de Valdavara (Becerreá) pueden hacer sombra a la fosa de Eirós. "Pero la de Triacastela es única para conocer los momentos finales del Paleolítico Superior", explica. El arqueólogo jefe se mostró "sorprendido" por los hallazgos y por lo que aún pueda aparecer. "Hay todo un potencial material". Esta segunda etapa de investigación en la cueva Eirós concluyó ayer, después de establecer 700 registros, a los que deben sumarse las 1.000 piezas obtenidas en el mismo lugar durante dos semanas en 2008. Importantes arqueólogos han manifestado que "en cinco o seis años, Eirós será una referencia obligada sobre el Paleolítico en Europa".

Puedes leer una entrevista con Arturo De Lombera en La Voz de Galicia

Los lugares de los Sucesos de Casas Viejas serán Bien de Interés Cultural

Publicado en Diario de Cádiz

"Preservar el escenario en el que se desarrollaron los Sucesos de Casas Viejas como un lugar de memoria, es decir, un espacio simbólico y físico vinculado a esos hechos". Este es uno de los argumentos incluidos en la resolución de la Consejería de Cultura que ayer se publicó en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía y por la que la Dirección General de Bienes Culturales incoa el procedimiento para la inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, como Bien de Interés Cultural del Lugar de los Sucesos de Casas Viejas. Y lo será cuando concluya la tramitación que ahara arranca con la tipología de Sitio Histórico. Pero ya, desde este preciso momento, quedan protegidos el local del sindicato Los Invencibles, el antiguo cuartel de la Guardia Civil, la choza de Seisdedos, la fonda y el Parque del Antiguo Cementerio.

Estos lugares tienen lógicamente en la actualidad usos distintos a los de 1933, con diferente configuración arquitectónica en algunos casos -aunque también perviven elementos originales en otros-, pero en todo caso sus actuales propietarios están obligados por la resolución a "mantenerlos y custodiarlos". La resolución incluye también, como bienes muebles, las narraciones orales de los testigos de aquellos hechos, la prensa escrita de la época y los archivos fotográficos, que quedan provisionalmente adscritos por su "íntima vinculación" con los bienes inmuebles.

Además de obligar a los propietarios a conservar los lugares de los Sucesos de Casas Viejas, la resolución les recuerda que deberán permitir que sean inspeccionados por las personas y órganos competentes de la Junta de Andalucía. Y también responsabiliza al Ayuntamiento de Benalup del futuro de la protección: "Debe procederse a la suspensión de las actuaciones que se estén desarrollando y de las licencias municipales de parcelación, edificación o demolición en las zonas afectadas, así como de los efectos de las ya otorgadas, hasta tanto se obtenga la autorización de la Consejería competente en materia de patrimonio histórico".

La resolución autonómica incluye un amplio anexo en el que se hace un resumen de los hechos sucedidos en Casas Viejas en enero de 1933, a raíz de la sublevación iniciada por la CNT en Barcelona. Esta narración de los trágicos sucesos se basa en la obra Los anarquistas de Casas Viejas, de Jerome R. Mintz. De manera somera, aunque precisa, se resume la enorme repercusión que en la localidad gaditana tuvo aquella insurrrección anarquista que comenzó en Casas Viejas cuando ya había fracasado en el resto del país, pues los insurrectos gaditanos tardaron en creer las noticias, confusas, que hablaban de ello.

Los sublevados se manifestaron por el pueblo, se enfrentaron a la Guardia Civil -hiriendo gravemente a dos miembros de la Benemérita que morirían posteriormente- y, finalmente, huyeron del pueblo o se refugiaron en la mítica choza de Seisdedos a medida que constataron el fracaso de la insurrección y la llegada de nuevas unidades de la Guardia Civil, sobre todo la Guardia de Asalto al mando del capitán Rojas, que ordenó incendiar la choza, después de haberla atacado a tiros, y que inició posteriormente un cruel escarmiento en el pueblo que concluyó con el arbitrario fusilamiento de personas inocentes que no habían participado en los hechos.

Silenciados durante años en la dictadura, los Sucesos se convirtieron en tabú en el propio pueblo, cuya memoria se trata ahora de proteger con la nueva medida.

Más información sobre los Sucesos de Casas Viejas en Wikipedia y en este reportaje publicado en El Mundo hace ya unos años

21 agosto 2009

El espejo de la vida numantina

Publicado en El Heraldo de Soria
Nuria Zaragoza

"Lo más importante de la campaña de este año es que se ha conseguido terminar de excavar una manzana entera -la manzana XXIII- y eso nos ha aportado una información que, de forma conjunta, es importantísima para conocer los modos de vida de los numantinos, de los que hasta ahora se conocía muy poco". El director de las excavaciones en Numancia, Alfredo Jimeno, hacía ayer balance de los trabajos desarrollados desde el pasado 7 de julio en el yacimiento arqueológico y destacaba el hecho de que la campaña actual cierra un ciclo en el que su equipo lleva trabajando cuatro años y que ha estado centrado en el descubrimiento de una manzana al completo.

"Hasta ahora conocíamos mucho de la urbanística y ordenación de Numancia, pero no se sabía nada de las manzanas" que integraban la ciudad, apuntó Jimeno, quien consideró que la información que aporta lo excavado en los últimos cuatro años es fundamental para subsanar ese déficit de información que existía hasta ahora sobre la vida de los numantinos, costumbres, lo que comían, cómo trabajaban..., en definitiva, sobre los modos de vida de las personas que habitaron Numancia durante los diferentes periodos en los estuvo ocupada.

Cerca de 60 personas, todos ellos licenciados, doctorandos o estudiantes de Arqueología, han trabajado este año para concluir los trabajos de vaciado de la manzana XXIII. Los trabajos han permitido identificar restos de gran interés entre los que destaca la presencia de un aljibe con un tipo de obra, diseño y tamaño desconocidos hasta ahora en Numancia que revela nuevos aspectos de la vida numantina.

"Hasta ahora todos los depósitos que habíamos localizado, y hay identificados 33, recogían el agua en el patio y eran más o menos del mismo tamaño y con la misma forma. Éste es completamente diferente.

Recepciona el agua de la propia calle y la lleva al depósito, y tiene mucha más magnitud", apuntó el director de las excavaciones, quien explicó además que la obra de fábrica es completamente distinta a lo visto hasta ahora, pues presenta una "construcción a base de dos paramentos de piedra, uno exterior de grandes piedras y otro interior de aparejo pequeño que refuerza y respalda al anterior".

El aljibe identificado es mucho mayor que los hallados hasta ahora, ya que tiene cinco metros de diámetro, y difiere también de los anteriores en su forma de cuña, empleada para recoger el agua de la calle.

El hallazgo de nuevos espacios

La campaña actual, cuya excavación culmina hoy, da continuidad al trabajo iniciado en 2006 y ha permitido el descubrimiento de unos 400 metros cuadrados más, que completan un total de 1.600 metros de la manzana XXIII.

Además del aljibe, se han podido identificar en la manzana establos, varios basureros, talleres metalúrgicos de bronce y hierro, tiendas, patios, corrales y casas; y numerosos restos de cerámicas y materiales metálicos. Todos estos espacios y materiales, en su conjunto, aportan una interesante y desconocida información sobre los modos de vida de Numancia, al tiempo que permiten conocer mejor la estructura urbanística de las ciudades superpuestas y sus diferencias entre ambas: una más antigua, siglos II-I aC y otra de época imperial romana (siglo I-II dC).

"Al no conocer una manzana al completo, perdíamos mucho de la vida de la ciudad", reparó el director en un intento por justificar el proyecto en el que han estado trabajando desde 2006 y que concluye ahora.

Volverán en septiembre

"La información que, en conjunto, aporta la manzana, nos aporta una serie de detalles muy ricos sobre los modos de vida numantinos", insistió el director, que anunció que el proyecto no concluirá definitivamente hasta el próximo mes de enero, cuando se publiquen las conclusiones del proyecto desarrollado sobre urbanística de Numancia.

De hecho, advirtió, esta previsto revisar ahora toda la información recogida en esta campaña y regresar de nuevo "unos días" en septiembre al yacimiento para "completar lo que falte y hacer un tipo de documentación a través de escáner". En concreto, que se llevará a cabo la reconstrucción en 3D del conjunto de la manzana y del depósito de agua con un escáner láser, contando con la colaboración del CAI de Arqueometría y Análisis Arqueológico de la Universidad Complutense.

Además, anunció, se realizará una análisis de fluorescencia de rayo X para conocer la composición diferenciada de los suelos, lo que permitirá determinar con más argumento las zonas de corrales y las ocupadas por humanos.

El estudio de los campamentos y el cero

Superada esta fase, se publicará el proyecto ejecutado y se comenzará a trabajar ya en una nueva propuesta de excavación en Numancia, que estará centrada en el cerco y los campamentos romanos.

"Desde hace tiempo, tenemos diseñado tratar tres aspectos fundamentales. En 2005 publicamos la necrópolis. En enero se presentará la publicación sobre urbanística de Numancia, donde se recogerán no sólo nuestros trabajos sino también las excavaciones anteriores, y para el futuro nos gustaría estudiar los campamentos y el cerco", anunció al respecto Jimeno, que admitió que le gustaría comenzar a trabajar en este campo ya en el próximo año pero matizó que dependerá de que la Junta considere el proyecto de interés y lo apruebe.

Garantizar su conservación

Numancia es en estos momentos el yacimiento que más información ha proporcionado al conocimiento del mundo celtibérico, tanto por ser el más extensamente excavado, como por la información de sus materiales, tanto cerámicos como metálicos, hallados en la ciudad y en su necrópolis.

A pesar del interés de los restos, Jimeno anunció que todo lo excavado por su equipo hasta ahora se encuentra en estos momentos tapado (no hay nada visible) y anunció además que en octubre se hará lo propio con la manzana XXIII. El director de las excavaciones justificó el abrigo de los restos en la necesidad de garantizar la conservación de los mismo.

En alusión a la posibilidad de poner esta manzana en valor en el futuro, Jimeno consideró que "ahora mismo no es aconsejable recuperar una superficie tan amplia" ya que en Numancia hay excavado muchísimo y buena parte está visible.

La fotografía viene de SOITU, donde encontrarás más información.

Aprovecho la ocasión para recordarte que en Salvemos Numancia realizan una defensa numantina del yacimento contra los intereses inmobiliarios también presentes allí.

Tútugi destapa sus secretos

Publicado en Ideal
José Utrera

Los últimos trabajos de investigación y consolidación realizados en la necrópolis de Tútugi han arrojado nuevas y excepcionales informaciones sobre la arquitectura funeraria ibérica. Así lo afirma María Oliva Rodríguez Ariza, profesora de Prehistoria de la Universidad de Jaén, investigadora del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica y directora del proyecto.

Hasta ahora se han realizado trabajos de excavación en siete túmulos cuyos resultados -salvo en el caso de uno de ellos que presentaba la estructura totalmente arrasada- «han sido magníficos, descubriéndonos nuevos ejemplos de una arquitectura funeraria excepcional, con cámaras subterráneas de enormes dimensiones o con túmulos construidos de más de 3 metros de altura», manifestó.

La investigación, actualmente en curso de estudiar y catalogar todo lo recuperado (cerámica, metal, carbones y otras piezas) está definiendo, en primer lugar, la cronología de cada uno de los túmulos excavados; en segundo lugar, el comienzo y desarrollo de la necrópolis y, por último, la estructuración de la necrópolis y, como reflejo, la estructura política y social del 'oppidum' ibérico de Tútugi entre los siglos V-II a. C. María Oliva refiere que «la necrópolis de Tútugi es única en cuanto a su extensión y al tamaño de sus túmulos, creando una monumentalización del espacio en el que se ubica y no sólo de las estructuras funerarias».

Túmulos restaurados
Los trabajos realizados han incluido la restauración y puesta en valor de otros 4 túmulos excavados en la campaña de 2006 para ser visitados por el público, algunos de ellos tan importantes como el túmulo 20 donde apareció la famosa diosa de Galera. Aún está pendiente la autorización, por parte de la Delegación de Cultura, para poder actuar en el túmulo 75 que documentó Juan Cabré en su publicación sobre el yacimiento de 1920 y que se ha convertido en un clásico de la arqueología peninsular.

María Oliva relata que en el mencionado túmulo 20 se podrá admirar, una vez que se coloque una estructura textil de protección especialmente diseñada para tal fin, un lugar de enterramiento que posteriormente se convierte en un lugar donde se realizaban algunos de los ritos mortuorios dentro de la necrópolis. Este «santuario» presenta una frágil arquitectura de adobes enmarcada dentro de un pavimento pintado en rojo y blanco que reproduce el llamado 'lingote chipriota', símbolo sagrado entre los pueblos del mediterráneo del milenio I a. C.

Los trabajos de investigación han podido determinar que el túmulo 50 se construyó tallando el extremo de una de las colinas sobre el valle del río Orce para, posteriormente, excavar en su interior una cámara cuadrangular con pasillo de acceso y un apéndice a modo de nicho, donde es posible que estuviera instalada una gran escultura pintada de rojo. El túmulo 73 está excavado en la roca formando una cámara cuadrangular con pasillo de acceso. Asimismo, el túmulo 62 presenta una planta parecida aunque realizada con muros de mampostería.

Según ha informado a IDEAL José Manuel Guillén Ruiz, coordinador de los yacimientos arqueológicos de Galera, los trabajos de restauración han sido subvencionados por el Ministerio de Fomento, con cargo a los fondos del 1% cultural, y el Ayuntamiento de Galera, con una inversión de 444.673 (el 75 % lo financia Fomento y el 25% el Ayuntamiento). El equipo que trabaja en Tútugi ha contado con la colaboración de las arqueólogas Ana Tapia Espinosa y Mercedes Beatriz Luna Collantes y un grupo de 12 obreros de Galera. El proyecto de puesta en valor ha sido realizado por propia María Oliva Rodríguez-Ariza y los arquitectos Juan Carlos García de los Reyes y Lucia Valero Martín.

Centro de recepción
José Manuel Guillén indica también que el proyecto de puesta en valor incluye trabajos de mejora de los caminos de acceso, para lo cual se están realizando muros de contención de taludes, creación de pequeños senderos de acceso a los túmulos y asfaltado de algunos tramos de pavimento que eviten problemas de corrimientos. Además, se están diseñando los paneles explicativos de los nuevos túmulos restaurados.

En un futuro inmediato se va a construir un centro de recepción de visitantes, en el que habrá una zona para la realización de talleres relacionados con los yacimientos arqueológicos de Galera, así como una sala de proyecciones y otra de exposiciones. El centro, que se construirá con cargo al Plan Urban de la Diputación, comenzará a construirse a final de año y podría estar terminado la próxima primavera.

20 agosto 2009

Catalunya inicia cada día más de cuatro intervenciones de urgencia o preventivas

Publicado en La Vanguardia
Ignacio Orovio

En lo que va de año, en Catalunya se han abierto 776 excavaciones arqueológicas, unas cuatro diarias. Obras ferroviarias y en carreteras, parques eólicos, gasoductos y revisiones rutinarias de las cartas arqueológicas locales han propiciado –hasta el 14 de julio pasado– todas estas actuaciones, preventivas o de urgencia y repartidas en 466 municipios: los principales son Barcelona (95), Tarragona (38), Sabadell (21), Tortosa (13), Terrassa y Mataró (9), Girona (8) y Lleida (7).

Estas casi 800 actuaciones dieron trabajo a 361 directores de excavación (algunos en más de una) y 1.562 arqueólogos de apoyo. La cifra hace prever que el número de actuaciones será similar al del año pasado, que acabó con 1.786 actuaciones. Esta cifra multiplica por dieciséis la primera disponible desde la restauración democrática. En 1980 fueron 106 las investigaciones abiertas.

Fruto de este crecimiento exponencial, el Govern acaba de aprobar el Pla Integral de l'Arqueologia a Catalunya (Piacat). Es un documento elaborado por 150 profesionales del sector, que se dividieron en 11 áreas de trabajo para poner al día un sector que se ha profesionalizado completamente en los últimos años. El documento se divide en cinco ejes –organización, intervención, formación y entorno profesional e investigación y difusión– cuyos principales avances fueron los siguientes:

Nuevos órganos. Una nueva sección de Paleontología se añadirá a las de Actuaciones e Información y Estudios en el Servei d'Arqueologia. El Museu d'Arqueologia ganará peso, al incluirse por primera vez en la planificación global del patrimonio arqueológico. Coordinará las acciones del Pla de Recerca y gestionará los depósitos de piezas. También se fomentará la coordinación con el Centre d'Arqueologia Subaquàtica.

Inventario. También se creará el Servei d'Inventari del Patrimoni Immoble i Moble, que recogerá todo el patrimonio cultural.

Título específico. De acuerdo con el debate académico actual, el Piacat apoya la creación prevista en el plan Bolonia de títulos específicos en Arqueología.

Un colegio profesional. Aunque un grupo de arqueólogos trabaja en ello desde hace meses, el sector carece de esta herramienta, por lo que la dirección general de Patrimoni Cultural avalará su creación. O vías de organización que garanticen la representación profesional del arqueólogo.

Un código deontológico. El plan insta a la elaboración de este documento para que la actividad profesional –en la que puede haber hallazgos de valor económico– se practique con la mayor honestidad y garantías.

Registro de empresas. Contendrá aquellas empresas que reúnen los requisitos necesarios para ejercer en el sector. El Consell Nacional d'Arqueologia i Paleontologia aprobará los criterios de valoración.

Ayudas. Un millón de euros se destinarán a hacer visitables los yacimientos. Una dotación de 300.000 euros anuales becará las tesis doctorales. Y la misma cantidad se destinará a resucitar el programa Excava, que durante tres años financió misiones arqueológicas en el extranjero.

Los análisis a los cuerpos hallados en la iglesia de San Esteban de Cuéllar (Segovia) revelan su relación de parentesco

Publicado en Europa Press

Los análisis antropológicos, paleopatológicos y genéticos practicados a los cuerpos hallados en la iglesia de San Esteban de Cuéllar (Segovia) revelan una relación de parentesco entre ellos, en el marco de la investigación promovida por la Fundación del Patrimonio Histórico (FPH) que ya arrojó "valiosos frutos" para el conocimiento de la vida en la Edad Media.

El análisis del ADN de las muestras tomadas en los restos, realizado por el Laboratorio de genética forense y genética de poblaciones de la Universidad Complutense, confirmó, con una probabilidad del 99,98 por ciento, que el hombre enterrado en el sepulcro que pertenece a Urraca García de Tapia era el padre del individuo enterrado con hábito franciscano en el sepulcro que pertenece a Martín López de Córdoba.

Con una probabilidad menor, un 68 por ciento, las pruebas apuntaron que la mujer enterrada en el sepulcro que pertenece a Urraca García de Tapia podría ser la madre de al menos uno de los dos bebés enterrados en el sepulcro de Martín López de Córdoba. Además, con ese mismo porcentaje de probabilidad, se reveló que los dos bebés enterrados en este sepulcro podían ser hermanos, según informaron a Europa Press fuentes de la FPH.

Asimismo, la buena conservación de los cuerpos se atribuyó a las "favorables" condiciones ambientales, dado que las tumbas estaban separadas del suelo y por lo tanto se mantuvo una temperatura baja. También se debe al uso de cal para impregnar los sudarios, en algunos casos introducida en las vías respiratorias.

En este sentido, la cal se usaba comúnmente como desinfectante ante enfermedades contagiosas y también tenía la consecuencia de secar el aire en espacios cerrados, circunstancia que favoreció también la conservación de los restos.

Las edades de los adultos oscilan entre los 30 y los 75 años y los dos niños podían tener entre uno y siete meses de vida. La talla media de los adultos es de 1,68 metros para los hombres y 1,59 para las mujeres.

ENFERMEDADES DE LA ÉPOCA

El examen de Paleopatología en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid reveló también algunos datos sobre los males que pudieron sufrir en vida las personas enterradas en San Esteban, como el deterioro de las piezas dentales, en el caso del hombre enterrado en el sepulcro de Urraca García de Tapia con periodontitis, lo que denota la falta de higiene propia de la época.

Por otro lado, en el cráneo del hombre enterrado con hábito franciscano en la tumba de Martín López de Córdoba había una lesión redonda, propia de enfermedades infecciosas como la tuberculosis, hipótesis reforzada por la presencia de cal en las vías respiratorias de esta momia.

Por su parte, en el cráneo de Isabel de Zuazo se observó un adelgazamiento del hueso parietal, que no es una patología sino una variación genética, más propia de las mujeres y que no produce ninguna otra alteración.

Al estudiar las columnas vertebrales se observó escoliosis y osteoporosis en el cuerpo de Isabel de Zuazo, lo que parece normal si se tiene en cuanta que pudo morir a los 75 años. Además, en esta misma mujer se observaron procesos degenerativos en la clavícula y los tobillos, también normales en esa edad.

Por otra parte, la mujer enterrada en el sepulcro de Urraca García de Tapia padecía una intensa artrosis en la rodilla derecha que debió reducir su movilidad y causarle dolor. Además, el pelo del individuo con hábito franciscano parece hueco, lo que podría ser compatible con un diagnóstico de tiña.

Por otro lado, los sudarios de Alfonso García de León e Isabel de Zuazo son de lino y el hábito franciscano de lana, según pudo comprobarse al mirarlos con el microscopio electrónico de barrido y compararlos con tejidos actuales.

En cuanto a los objetos hallados en las tumbas, además de la importante colección de bulas impresas de Isabel de Zuazo, únicamente se encontró un colgante de vidrio de forma cúbica y un asta despuntada.

Más información (e imágenes) en El Norte de Castilla
Estos sepulcros ya dieron de qué hablar en Mayo de 2009.

Apudepa denuncia “nuevos” y “graves” daños en la necrópolis medieval de San Grimién en Hecho

Publicado en Aragón Digital

La Asociación de Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés (Apudepa) ha constatado durante su última visita de inspección que la necrópolis de San Grimién en Hecho ha sufrido “nuevos” y “graves” daños desde que el año pasado la Asociación denunciara el mal estado y el abandono del yacimiento.

En un comunicado, la entidad afirma que puso en conocimiento de las administraciones el abandono de la necrópolis, y “pese a la airada reacción del Ayuntamiento de Hecho en aquella ocasión, nada se ha hecho desde las instituciones para mejorar su estado”.

Para la Apudepa, la “dejadez” institucional ha provocado que varias de las tumbas hayan sufrido “graves daños” tales como desprendimiento de lajas o pérdida y esparcimiento de los restos humanos. Por ello, aseguran que si el yacimiento continúa así, los daños serán todavía mayores.

Además, denuncian que algunas de las tumbas que se encuentra en mejor estado está cubierta desde hace años por “sábanas indecentes”, ancladas por piedras del lugar, totalmente expuestas a la acción humana y a la intemperie.

Apudepa reitera su solicitud de que las administraciones implicadas tomen las medidas oportunas para asegurar la información que el yacimiento contiene, su conservación y el decoro y respeto a los restos humanos conservados.

Más información sobre el estado de conservación de la necrópolis en La Lista Roja del Patrimonio

16 agosto 2009

Finalizan las excavaciones en el yacimiento romano de Los Bañales de Uncastillo

Publicado en Aragón Digital

Tras un mes de trabajo, este fin de semana han finalizado las excavaciones arqueológicas en el yacimiento romano de Los Bañales, objeto de un Plan de Investigación de la Dirección General de Patrimonio del Gobierno de Aragón ejecutado por la Fundación Uncastillo y de cuya dirección científica son responsables los navarros Javier Andreu y Juan José Bienes, de la UNED de Tudela.

Los trabajos han sido posibles gracias a la financiación del Gobierno de Aragón y al concurso de las compañías privadas EON-España y General Eólica Aragonesa. Diez estudiantes universitarios -seis de ellos alumnos de la UNED de Tudela- han participado en las excavaciones gracias a un convenio firmado el pasado mes de Junio entre la Fundación Uncastillo y la UNED. Los trabajos han constituido un excelente complemento para la formación práctica de los estudiantes que han podido así acercarse a la práctica de la arqueología de campo.

Los trabajos arqueológicos se han llevado a cabo de forma simultánea en dos frentes. Por un lado, se ha excavado la terraza inferior del cerro de El Pueyo, junto a las termas romanas de Los Bañales. Dicha excavación, dirigida por Juan José Bienes, ha contactado con una notable estructura doméstica objeto de diversas remodelaciones a través de su historia y abierta a una calle empedrada. La información facilitada por este inmueble está permitiendo conocer mejor el urbanismo de la ciudad romana que ocupó el solar de Los Bañales así como los avatares de la historia de dicho centro. En las excavaciones se han recuperado notables ejemplares de vajilla romana de mesa, objetos de ornato personal, monedas y una notable tinaja de almacenaje romana que están ya siendo estudiados por el interdisciplinar equipo científico que la Fundación Uncastillo ha conformado para la ejecución del Plan de Investigación.

La Fundación, además, según declaró su director, José Francisco García, estudia instalar una exposición de estos materiales arqueológicos en Uncastillo con motivo del I Coloquio Internacional de Arqueología, Epigrafía e Historia Antigua de Los Bañales que tendrá lugar a finales de Marzo del próximo año en la sede de la Fundación y para el que ya han confirmado su asistencia como ponentes más de quince docentes de hasta diez universidades distintas, españolas y europeas. Dicho coloquio -cuya coordinación académica y científica será responsabilidad de la UNED de Tudela- será, además, el centro de la “campaña de invierno” -como la denominó José Francisco García- de la investigación en Los Bañales. En ella se planificarán los trabajos del próximo año y se estudiará y procesará pormenorizadamente todo el material recuperado en las excavaciones de este último mes.

El segundo frente de trabajo de la excavación lo ha constituido un monumental muro -de hasta cincuenta metros de longitud- ubicado en el paraje de Cubalmena, en la muga entre los términos municipales de Biota y de Uncastillo. En él, y bajo la dirección de la arqueóloga Silvia González, experta en obras hidráulicas romanas, se ha contactado con lo que podría ser un posible dique relacionado con el abastecimiento de agua al territorio o a la ciudad de Los Bañales. Aunque el hallazgo habrá de ser estudiado en detalle en los próximos meses para ser presentado en un monográfico que la revista Caesaraugusta prepara sobre Los Bañales, de confirmarse su romanidad, se trataría de la primera presa romana de arcos de gravedad de la Hispania romana.

Al margen de los resultados científicos, el director científico del Plan de Investigación de la Fundación y Coordinador de la Sección de Historia de la UNED de Tudela, Javier Andreu, se mostró especialmente satisfecho por el hecho de que más de dos centenares de personas hayan visitado el yacimiento en el mes durante el que se ha prolongado la excavación. Un centenar de personas lo hizo en la Jornada de Puertas Abiertas celebrada el 25 de julio pasado, pero la otra mitad lo ha hecho, sin duda, estimulada por el atractivo turístico del lugar y por el apoyo que ha prestado a éste el espacio monográfico dedicado a Los Bañales en la nueva Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Uncastillo. La Fundación trabaja también en un plan de viabilidad para la conversión del espacio arqueológico de Los Bañales en foco de desarrollo turístico de la comarca de las Cinco Villas.

En el mes de julio también publiqué una noticia sobre este yacimiento

Las excavaciones del Alcázar de Jerez hallan un nuevo ala del Pabellón Real

Publicado en Andalucía Información
I.J.

La intervención arqueológica puntual que se viene ejecutando desde junio en el Alcázar para continuar la recuperación del recinto arroja ya nuevos descubrimientos, como es el caso de una nueva ala del Pabellón Real. Estos trabajos, encaminados a la investigación y puesta en valor del patrimonio histórico-artístico de la ciudad, han sido encargados por las delegaciones municipales de Urbanismo, a quien corresponde la dirección técnica del proyecto, y de Cultura y Fiestas, responsable de este Bien de Interés Cultural.

Tal y como explica el delegado de Urbanismo, Juan Pedro Crisol, desde su Delegación se está trabajando en coordinación con el resto de áreas municipales en la ejecución de los diferentes proyectos incluidos en los planes de fomento del empleo, si bien para el edil socialista esta actuación constituye “un nuevo ejemplo de la apuesta del Gobierno municipal por la recuperación del patrimonio histórico artístico local, en un monumento, como es el Alcázar, que es uno de los mayores atractivos turísticos de la ciudad”. Por su parte, la delegada de Cultura y Fiestas, Dolores Barroso, resalta especialmente el hecho de que este bien cultural haya revalorizado exponencialmente desde el punto de vista pedagógico, cultural y turístico y como espacio abierto y cercano a los ciudadanos, así como que el Gobierno local ha priorizado este año en su presupuesto.

Según las primeras indagaciones y análisis de los arqueólogos municipales que trabajan sobre el terreno, todo parece apuntar a que se trata de una nueva ala del Pabellón Real, así como de la infraestructura que compone el entramado del conjunto hidráulico que abastecía al Alcázar tanto para el baño, como para el riego de huertos o el abastecimiento de agua potable.

En plena investigación
A este espacio, que ya está restaurado, habría que añadir ahora -de confirmarse el nuevo descubrimiento- otra ala más. En este sentido, hasta el momento poco más pueden aportar los expertos en la materia ya que se encuentran inmersos en plena investigación. Lo que sí han desvelado es que podría dejar al descubierto una serie de infraestructuras y equipamientos asociados al Pabellón como las letrinas, cuyo funcionamiento parece ser de gran complejidad y que resultan de gran valor, al ser de las pocas documentadas del periodo islámico.

Como subraya Barroso, no hay que olvidar que el agua jugaba un papel fundamental en la cultura árabe, por lo que este descubrimiento es muy importante para completar las investigaciones sobre costumbres de sus primitivos moradores así como la disposición de los espacios en el recinto.

En este sentido, los arqueólogos municipales han adelantado que viendo el sistema de canalizaciones, que ya se puede apreciar, así como el nivel tecnológico del mismo, se puede aseverar que las infraestructuras hidráulicas construidas eran muy avanzadas para la época y en poco varía con respecto a las que actualmente se ejecutan. Asimismo se ha comprobado cómo tras pasar la ciudad a dominio cristiano en torno al año 1.264, existe un cambio de uso y funcionalidad de esta red de canalización de agua que implica la anulación de una serie de estructura, el aprovechamiento de otras así como el desarrollo de otras nuevas que se alejaban del espíritu cultural almohade.

Hay que tener en cuenta que para documentar los elementos que salen a la luz durante las labores de investigación arqueológica es fundamental la cerámica, el fósil guía de todas las unidades estratigráficas que analizan los expertos. Para ello hay que lavarla por separado y estudiarla para determinar por ejemplo la época de que datan las piezas o el estudio de los materiales empleados. Aparte de este hallazgo, en otras intervenciones realizadas en el Alcázar aparecieron fondos de cabañas así como la huella de la presencia de antiguos silos que parece que correspondían a asentamientos de época prehistórica, como es del periodo Calcolítico.

El contenedor de la Prehistoria

Publicado en La Mañana
Francesc Guillamet

Poco después de su localización, el Centre d’Estudis del Patrimoni Arqueològic de la Prehistòria, el equipo de la UAB dirigido por Rafa Mora y Jorge Martínez inició las excavaciones en el yacimiento, que se ha revelado como uno de los hallazgos más importantes del mundo de la arqueología en Catalunya. El hallazgo más importante de esta campaña –que finalizó recientemente– es la localización de estructuras del neolítico. El catedrático de la UAB, Rafa Mora, explicó que se han localizado 32 estructuras neolíticas en 40 metros cuadrados. La importancia del hallazgo radica en el hecho de que el neolítico se concentra, principalmente, en la zona del litoral, mientras que no es tan frecuente en el interior –salvo casos como el de Seròs o Juneda– porque a menudo han sido arrasados, según explica Rafa Mora. Entre las estructuras neolíticas hallada figuran hogares, fosas para guardar alimento, braseros para mantener calientes los alimentos y otras estructuras. El profesor de la UAB explica que las comunidades den neolítico llegaban a la zona, construían una estructura para encerrar el ganado y ellos vivían al lado. Cuando se marchaban apilonaban los excrementos de los animales y los quemaban. El estudio de estos niveles es lo que permite afirmar que la cueva fue ocupada en reiteradas ocasiones por estos grupos de pastores nómadas.

Pero la Cova Gran no sólo tiene neolítico, sino que es de vital importancia para resolver algunas cuestiones que se plantean en el paleolítico, como la posible coexistencia entre neandertales y homo sapiens. Rafa Mora explica que de los estudios realizados en el yacimiento se desprende que ambas especies no convivieron, puesto que su tecnología era totalmente diferente. En la Cova Gran el Paleolítico medio llega hasta los 34.000 años y explica las formas de vida de los últimos neandertales. Precisamente el cambio de hábitat y de los procesos cognitivos fue lo que llevó a la desaparición de esta especie, que quedó arrinconada en algunas zonas hasta que otra especie de homínidos, el homo sapiens, se hizo con el dominio del medio sin que ellos pudieran adaptarse. Y es que la Cova Gran también tiene registros del homo sapiens, puesto que fue ocupada repetidamente por este homínido durante el paleolítico superior de la etapa magdaleniense. La Cova Gran de Santa Linya se completa con los registros del mesolítico –de 9.000 años de antigüedad y aún poco conocidos– y con la etapa del bronce. Es en este registro –el más reciente de la cueva– donde se han encontrado unos moldes que podrían haber servido para construir lingotes de bronce hallados después en otros yacimientos. Rafa Mora concluye que la Roca habría podido servir como taller de fundición.

Aún quedan siete metros de profundidad por excavar

Del potencial estratigráfico de la Cova Gran y de las sorpresas que aún puede dar dan testimonio los datos de la propia intervención. Y es que según recuerda Rafa Mora sólo se han excavado dos metros de profundidad y el registro es de nueve, por lo que aún quedan siete metros que pueden dar muchas sorpresas.

Rafa Mora destaca que por su secuencia estratigráfica, con cuatro transiciones desde el paleolítico medio al bronce, se trata de un yacimiento inédito en Catalunya que aún tiene mucho futuro.


Más información en la web del yacimiento

Castillo de Gauzón, en la última frontera

Publicado en La Nueva España
Saúl Fernández

La fortaleza enclavada en lo más alto del peñón de Raíces era el hito que marcaba la última frontera del Reino de Asturias. Iván Muñiz, codirector de las excavaciones, junto a Alejandro García, explica su importancia acudiendo a la ordenación territorial. El castillo era la sede que acogía el poder delegado del monarca, «una especie de diputación, un órgano superior al de los concilios que se celebraban en todas las villas». Los arqueólogos, en estos dos años, desde 2007, han dejado al descubierto trece siglos de historia regional y de defensa. «Los hallazgos arqueológicos se corresponden miméticamente con la documentación histórica que menciona la fortaleza ya en el siglo X», explicó Muñiz. Los restos cerámicos, las herramientas, los cuchillos, las puntas de las flechas rescatadas del subsuelo demuestran la vida cotidiana bajo las almenas del peñón que defendía la costa avilesina de las incursiones vikingas, los reyes de los océanos de la Edad Media.

«El castillo era como un faro que se veía desde el mar, estaba en primera línea», comentó Muñiz. En la actualidad, la tierra se ha comido el mar y las olas, aunque cercanas, ya no rompen en las laderas del peñón, cuando eran acantilados. «Los descubrimientos arqueológicos describen un microcosmos de la sociedad feudal. A la vez que encontramos piezas cerámicas de lujo, de importación, hemos visto también restos de barro cocido en los hornos cercanos, es decir, que junto a los grandes señores vivían los soldados de baja clase. Caballeros por un lado y siervos por el otro», apuntó el codirector de la excavaciones.

El castillo en la alta Edad Media estaba gobernado por un conde. Cuando llegó la baja Edad Media el titular de la fortaleza fue el encomendero de la Orden de Santiago. Así sucedió hasta los siglos XV y XVI, cuando los documentos hablan de ruinas que el tiempo recubrió de olvido hasta mediados del pasado siglo, cuando se produjo una controversia sobre la ubicación real del castillo. Si se llama Gauzón es posible que se encuentre en Gozón. Juan Uría Ríu zanjó la polémica: el castillo se encontraba en la cima del peñón. Las primeras excavaciones, las de Vicente José González, vinieron a subrayar la tesis de Uría. Los hallazgos de Muñiz y de García demuestran la convivencia bajo las murallas. Realidad, pasado de Asturias.

Identificada en Prases una sección de una estela cántabra de época antigua

Publicado en El Diario Montañés
Íñigo Fernández

La localidad pasiega de Prases (Corvera de Toranzo) podría incorporarse al mapa de los grandes hallazgos arqueológicos de Cantabria si, como parece, la piedra identificada en una tapia del lugar se confirma como una estela cántabra de época antigua.

En principio, todos los indicios apuntan a una pieza de época prerromana o romana, según han confirmado distintos especialistas y, entre ellos, Eduardo Peralta. Sin embargo, será preciso someter a la piedra a pruebas de laboratorio con el fin de establecer su datación con toda certeza.

El asunto ha sido puesto ya en conocimiento de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte del Gobierno de Cantabria, cuyo servicio de Patrimonio indicará en los próximos días los pasos a seguir. De momento, el proceso lo dirige personalmente el alcalde de Corvera de Toranzo, José Manuel Martínez Penagos (PP), asesorado por el técnico de la empresa Gea-Impulso Global, Joaquín de Diego.

La finca en la que se ha identificado la piedra labrada es propiedad de Alejandro López, un vecino de Prases de 73 años de edad, cuya residencia familiar se encuentra situada, precisamente, frente a la tapia.

«Siempre estuvo aquí»
Alejandro López recuerda la 'piedra' de toda la vida, aunque nunca le concedió el valor que, según los técnicos, parece entrañar. Antiguamente formó parte de una cerca, al menos desde la época de sus padres. «Siempre estuvo aquí, junto a la casa», atestigua.

Hace treinta años, cuando se armó la tapia actual, fue utilizada por los canteros como un elemento más de la construcción. Todos se dieron cuenta de que la piedra mostraba extrañas formas, y por esa razón, la colocaron en un lugar destacado, junto a la puerta de acceso a la huerta. Pero nadie reparó en su verdadero significado, hasta hoy.

«Una vez me preguntó el médico por el dibujo, pero no le dimos más importancia», explica Alejandro. Finalmente, fue el actual alcalde, muy aficionado a la arqueología, quien intuyó su verdadero valor y contactó con Joaquín de Diego para que este procediera a realizar un estudio más minucioso, cuyos resultados ahora se conocen.

Secuencia
«Puede ser una estela. Está a falta de constatar, pero lo que es seguro es una piedra labrada y todo apunta a que una piedra cántabra prerrománica o románica. Se sabrá más cuando se investigue y, de hecho, ya hemos empezado a investigar», afirma Joaquín de Diego.

A su juicio, en el descubrimiento de esta estela se ha reproducido el esquema clásico: alguien conserva la piedra, sin saber su valor (Alejandro); otra persona se pregunta por su significado y se pone a funcionar (José Manuel); y un tercero emprende la investigación (en este caso él mismo).

La característica de los dibujos -«lóbulos lineales semejantes a los de la figura denominada trisquel»-, el tipo de piedra arenisca, el emplazamiento, la proximidad a una necrópolis medieval... todo apunta a una nueva estela cántabra, descubierta, como siempre, gracias a la afortunada combinación de la casualidad y el acierto.

Las cuevas del Oriente de Asturias en el XIX Ciclo de Conferencias sobre Prehistoria

Publicado en SantanderCiudadViva

El miércoles 19 de agosto, Alfonso Millara, Encargado de las Cuevas del Oriente de Asturias, expondrá en el Gran Hotel Balneario de Puente Viesgo, las medidas aplicadas para la conservación de las pinturas de la cueva de Tito Bustillo (Ribadesella, Asturias).
El pasado miércoles 12 de agosto, el Conservador y Director de la Cueva Museo de Ardales, Pedro Cantalejo Duarte, en su conferencia “Las cuevas andaluzas y su relación con los adolescentes”, expuso su teoría del uso pedagógico, en época prehistórica, de las cuevas con representaciones artísticas.

El XIX Ciclo de Conferencias sobre Prehistoria que organiza la Sociedad Prehistórica de Cantabria en el Gran Hotel Balneario de Puente Viesgo contará el miércoles 19 de agosto, a las 20.00 horas, con la presencia de Alfonso Millara, Encargado de las Cuevas del Oriente de Asturias, que expondrá en el Gran Hotel Balneario de Puente Viesgo, las medidas aplicadas para la conservación de las pinturas de la cueva de Tito Bustillo (Ribadesella, Asturias).

En la conferencia del pasado 12 de agosto Pedro Cantalejo Duarte, Conservador y Director de la Cueva Museo de Ardales, Málaga, expuso su teoría del uso pedagógico, en los rituales de pubertad, de las cuevas andaluzas con pinturas, como vehículo de transmisión de la cultura básica en la prehistoria.

Comenzó su exposición centrando cronologicamente las cuevas de la provincia de Málaga que fueron descubiertas por Breuil entre los años 1912 y 1918. La historiografía de la época solo se ocupó de las grandes representaciones artísticas pasando por alto una importante número de representaciones e intervenciones del hombre paleolítico, no por menos espectaculares menos importantes para el conocimiento del modo de vida de los grupos humanos que habitaron las cuevas.

Numerosas improntas de manos, representaciones esquemáticas femeninas, y signos de difícil interpretación tapizan las paredes de las cuevas esperando que los arqueólogos extraigan de ellas la información oculta a los ojos profanos.

Los métodos de investigación tradicionales no han permitido un profundo estudio de la participación de adolescentes en las cuevas paleolíticas, sin embargo pudieron ser unos de los receptores de una parte de la información contenida en las cuevas.

Con los nuevos métodos de investigación, se estudian y se descubren en las cuevas numerosas trazas de participación de adolescentes, pequeñas manos pintadas en positivo y en negativo, digitaciones de dedos de pequeño tamaño y pisadas de adolescentes como en Niaux y Chovet.

La participación de los adolescentes en el arte paleolítico abre nuevas posibilidades de interpretar culturalmente el uso de las cuevas.

15 agosto 2009

El fuego empezó a usarse para fabricar herramientas hace más de 160.000 años

Publicado en EuropaPress

Los primeros humanos usaban el fuego para fabricar herramientas hace más de 160.000 años, según un estudio de la Universidad de Ciudad del Cabo en Sudáfrica y la Universidad del Estado de Arizona en Estados Unidos que se publica en la revista 'Science'.

Según los investigadores, alrededor del momento en el que los primeros humanos comenzaron a realizar marcas simbólicas, joyas y otros signos de conducta humana 'moderna', también utilizaban ya fuego para mejorar sus herramientas de piedra.

Varias líneas de evidencia sugieren que los humanos comenzaron a utilizar materiales más avanzados y a desarrollar una conducta simbólica hace alrededor de 75.000 años en África.

Los científicos, dirigidos por Kyle Brown, muestran ahora que los humanos alrededor de este momento estaban utilizando de forma sistemática el fuego para mejorar los materiales en bruto existentes y aumentar la calidad y eficiencia de los productos fabricados con herramientas de piedra.

Los autores recopilaron restos de herramientas de silcrete de yacimientos arqueológicos en el sur de África y muestran, utilizando varias técnicas, que la roca fue deliberadamente transformada por calentamiento.

Los resultados sugieren que este tratamiento de calor se produjo hace 164.000 años y predominó en la producción de herramientas de silcrete hace alrededor de 72.000 años.

Los autores especulan que la tecnología por tratamiento de calor podría ser una señal de cognición compleja y podría proporcionar un vínculo entre el uso simple del fuego para cocinar y entrar en calor y la producción final de cerámicas y metales.

Unas 240 personas visitan las excavaciones del antiguo edificio de Sementales de Tudela

Publicado en Diario de Navarra
M.T.

Unos trabajos que han sacado a la luz , en el patio del edificio, restos de un mercado de la época islámica (siglo XI y principios del XII) y tres moldes de fundición para fabricar objetos de bronce, además de cerámicas.

La demanda para participar en las visitas desbordó las previsiones del ayuntamiento. Había organizado dos, para un máximo de 60 personas cada una por motivos de seguridad, pero ante el número de inscritos preparó una más. Finalmente, y tras las protestas de un grupo de personas en lista de espera que afirmaron que en los carteles anunciadores del acto no decía que había que inscribirse, se organizó un cuarto grupo.

El arqueólogo Juanjo Bienes, responsable de las excavaciones, dirigió las visitas. Primero, en el palacio Decanal mostró los citados moldes y varias cerámicas islámicas encontradas. Después, ya en el edificio , explicó la historia del mismo, que está cerrado desde 1991, y los restos encontrados en las excavaciones que, según dijo, "descartan que la judería vieja estuviera en esta zona".

El ayuntamiento promovió estas visitas dentro de la jornada "Tudela, una ciudad, tres culturas" cuyo fin era "destacar ese pasado de convivencia importante, a veces en mejor o peor armonía, de la cultura cristiana, musulmana y judía en la ciudad", dijo el edil de Turismo, Jesús Álava. La jornada programó tres conciertos para la noche con los que "se pretende plasmar, con la música, que las tres culturas se vuelven a encontrar ", indicó. Destacó la calidad de los músicos -uno iraní, otro israelí y un español- y el éxito de la jornada.

14 agosto 2009

Algunos neandertales no podían percibir el gusto amargo

Publicado en Levante

Esta conclusión la ha obtenido un grupo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) tras analizar un fragmento del gen TAS2R38 -que codifica la percepción de la amargura en los humanos modernos- en un individuo neandertal del yacimiento de El Sidrón, en Asturias, según ha informado el CSIC.

El individuo analizado tenía la variante causante de la no percepción del sabor amargo en una copia del gen, pero no en la otra, "lo que significa que era capaz de notar el gusto amargo, pero menos" con lo que necesitaría más cantidad de sustancia para percibir su amargura, según el investigador Carles Lalueza Fox.

Los compuestos que causan el sabor amargo están presentes en muchos vegetales, como el brócoli, la col, las coles de Bruselas, las endivias o algunas frutas y pueden ser tóxicos si se ingieren en grandes cantidades por lo que es difícil entender la existencia evolutiva de individuos que no pueden notarlos.

"La existencia de individuos que no perciben el sabor amargo es un misterio desde el punto de vista evolutivo. Quizás podría explicarse por algún efecto selectivo que confiriera a los no gustadores alguna ventaja, como detectar algún otro compuesto todavía no identificado, pero aún no lo sabemos", según Lalueza.

La variación en la percepción del gusto amargo se descubrió en 1931, cuando Arthur L. Fox, un trabajador químico de la multinacional Pont de Neumours and Company (Estados Unidos), sintetizaba un compuesto llamado feniltiocarbamida (PTC) y éste se volatilizó accidentalmente en el laboratorio.

Uno de sus colegas advirtió de lo amargo que era mientras Fox no notaba nada y una encuesta entre los empleados mostró que había gustadores y no gustadores y estudios posteriores demostraron que el 30 por ciento de los humanos no percibe el sabor amargo.

Los individuos con una determinada clase de aminoácido en las dos copias del gen en la posición 49 siempre son no gustadores y aquellos que la presentan en una de las dos copias del gen, como el neandertal de El Sidrón, pueden percibir el sabor, pero menos.

El yacimiento asturiano, en el que se realizan excavaciones desde 2000, ha permitido recuperar hasta la fecha cerca de 1.600 restos óseos de, al menos, diez individuos neandertales.

El genoma mitocondrial de uno de ellos permitió conocer que el antepasado común materno de todos los genomas mitocondriales neandertales vivió hace sólo 110.000 años, por lo que sería más reciente que la de los humanos modernos, que los investigadores sitúan en África hace 150.000.

Hallan restos de un hogar que el Homo Heidelbergensis usó para hacer fuego

Publicado en EPA

Una placa de hogar utilizada para hacer fuego hace unos 250.000 años, en el periodo Paleolítico Inferior, ha sido descubierta en el yacimiento de Irikaitz, situado en el municipio guipuzcoano de Zestoa, un hallazgo que podría arrojar luz sobre la capacidad que el Homo Heidelbergensis tenía para utilizar el fuego.

El director de estas excavaciones, Álvaro Arrizabalaga, ha explicado a Efe que se trata de una pequeña estructura circular claramente "intencionada" de aproximadamente un metro de diámetro, con componentes de basalto y otro tipo de minerales que tienen cualidades refractarias, lo que los hace idóneos para aprovechar el calor del fuego.

Algunas de estas piedras aparecen "intensamente quemadas" y su posterior análisis permitirá hacer una datación más rigurosa sobre el momento en que fueron utilizadas.

Además los restos se encuentran cerca de otra estructura que podría haber sido utilizada como "paravientos" o como parte de una choza, una ubicación adecuada para mantener vivas las llamas de una fogata.

A juicio de Arrizabalaga, es "poco compatible" que los heidelbergensis fueran capaces de seleccionar estos materiales específicos y de elaborar una placa de hogar como ésta con que no tuviesen los conocimientos necesarios para hacer y controlar el fuego.

El equipo de Arrizabalaga, formado por arqueólogos de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, lleva a cabo sus prospecciones estivales en este espacio desde hace una década, periodo durante el cual también han descubierto un gran número de instrumentos de piedra que apuntan a que este sitio era habitualmente utilizado para tallar minerales.

Las investigaciones han desvelado que estos seres humanos estuvieron acudiendo a este lugar durante "milenios" por alguna razón concreta sobre la que cabe especular con las ventajas que ofrecía este paraje para cazar o con su riqueza en materias primas.

El Homo Heidelbergensis es un antepasado del hombre de Neandertal, de modo que nuestra especie no desciende de él aunque los expertos lo consideran un ser humano.

Arrizabalaga explica que estos cazadores-recolectores subsistían gracias a los recursos que encontraban en su entorno cercano y se organizaban en pequeños grupos de una docena de individuos compuestos por dos o tres unidades familiares.

El reducido número de miembros que integraban estos clanes les permitía trasladarse varias veces al año y montar campamentos provisionales en zonas que conocían y en las que sabían que las condiciones de cada estación les brindaban mayores oportunidades para conseguir alimento, su objetivo principal.

Probablemente conocían bien el paraje de Irikaitz, al que retornaban en octubre para saciar su hambre con nutritivas avellanas, fáciles de recolectar por su abundancia en este mes.

Prueba de ello es que los arqueólogos también han encontrado restos fósiles de cáscaras de estos frutos, así como evidencias que apuntan a que hace un cuarto de millón de años existía un bosque de avellanos en este enclave.

Ahora comienza una larga tarea de laboratorio que puede alargarse más de un año con el fin de analizar detenidamente los hallazgos y llegar a conclusiones más precisas sobre hasta qué punto esta especie dominó el fuego, una incógnita aún no resuelta por la falta de indicios concluyentes.

Los heidelbergensis siguen siendo un misterio, aunque gracias a hallazgos como el de Irikaitz es posible imaginarlos alrededor de este hogar en una fría noche de hace 250.000 años, buscando el calor del fuego para hacer frente a las gélidas temperaturas del otoño prehistórico, incapaces de figurarse que varias eras más tarde, en ese mismo lugar, la hoguera que ellos prendieron iluminaría el camino de los arqueólogos.

Hallan en Gijón una silla romana de 1.500 años de antigüedad

Publicado en La Voz de Avilés
I. Villar

Hace más de 1.500 años, en el Gijón romano, alguien arrojó una silla de madera al fondo del depósito que abastecía de agua a la ciudad, posiblemente en sus últimos años de uso. Quince siglos después las excavaciones realizadas bajo el edificio de Tabacalera han conseguido recuperarla casi en su totalidad, un hecho «excepcional», en opinión de la directora de la campaña arqueológica, que anteriormente sólo se había dado en las ciudades de Pompeya y Herculano, momificadas bajo la lava del Vesubio.

Ayer Carmen Fernández Ochoa presentaba pletórica los objetos de origen romano recuperados del fondo del antiguo depósito durante la tercera incursión en las tripas de Tabacalera. Aseguró que gracias a ellos «Gijón marcará un hito en la arqueología romana». La clave, el entorno creado por los limos -lodos- acumulados en el interior de la construcción romana, que enterraron estos objetos y los mantuvieron en un ambiente anaerobio -sin oxígeno- protegidos de la acción de bacterias y otros elementos agresivos. Esto ha permitido que llegaran hasta nuestros días en un «muy buen estado de conservación». Si bien es habitual la recuperación de objetos de metal y cerámica, no lo es tanto el de enseres de madera. Y mucho menos el de muebles completos.

Vajilla de madera
La silla desenterrada, del siglo IV ó V -época tardorromana-, conserva todas sus patas, el respaldo y los dos brazos, si bien uno de ellos apareció separado del resto de la estructura. Muestra trabajos decorativos en la madera y le falta el asiento, lo que lleva a los investigadores a pensar que, una vez rota, fue arrojada al depósito. Supone un hallazgo único en la Península Ibérica y de hecho, según Fernández Ochoa, sólo en las ciudades del Vesubio se han podido recuperar muebles en un estado de conservación que permita reconstruirlos. «Hasta ahora las únicas fuentes para saber cómo eran los muebles romanos eran la iconografía de la época -estelas funerarias, grabados...- y los restos aparecidos en Pompeya y Herculano. Esta silla es excepcional en el conjunto del Imperio».

Junto a la silla vieron la luz, también como hallazgo nada usual, tres platos o fuentes de madera, de 30 centímetros. «Iguales que los que se usan hoy para comer el pulpo», bromeó Justo Vilabrille. Carmen Fernández Ochoa apuntó que en España sólo en Irún se habían podido recuperar útiles de cocina hechos de madera, por las dificultades que presenta este material para conservarse a lo largo de los siglos. «Cuando se recuperan vajillas de cerámica, siempre decimos que también debían de usar madera. ¡Ahora es que lo hemos encontrado!». También aparecieron tres cubos de madera y metal, que posiblemente cayeron al depósito mientras se recogía agua y tres suelas de sandalia similares a la que ya se desenterró hace un año en la anterior fase de excavaciones.

Microfauna
Del limo también se pudieron recuperar restos de pequeños animales -microfauna- como gusanos, ratones y mariposas. «Es fácil hallar cadáveres de grandes animales como vacas u ovejas, pero esto es algo espectacular, original, que sólo se había descubierto en Bretaña y Alemania, nunca en la Península Ibérica ni el resto del Mediterráneo».

Todos los restos recuperados se están estudiando en diferentes universidades y departamentos del Centro Superior de Investigaciones Científicas en Irún, Valencia, Sevilla, Oviedo y Madrid.

Las excavación en el castillo de Tiebas revela un conjunto de azulejos medievales

Publicado en Mundohistoria

El castillo de Tiebas tiene en sus piedras (más bien en sus ruinas) cicatrices de buena parte de las guerras que ha sufrido Navarra desde la Edad Media. Pero también guarda un recuerdo de sus primeros años, cuando fue construido como palacio y no como instalación defensiva.

Las obras de consolidación de las ruinas del castillo han revelado una zona pavimentada con azulejos de época medieval, probablemente del tiempo de su construcción como castillo del rey Teobaldo II.

Los azulejos, en colores ocres y con dibujos geométricos, vegetales y de dragones fueron importados desde Francia, probablemente desde Champaña, la tierra natal de los Teobaldos, ya que la técnica que se utilizó no es la misma que se empleaba en España, según explica Mikel Ramos Aguirre, del gabinete arqueológico Navark.

Los azulejos serán retirados estos días y, según comentó el consejero de Cultura y Turismo, Juan Ramón Corpas, serán trasladados al almacén de arqueología del Gobierno foral, donde serán estudiados. Posteriormente, se tomará una decisión sobre cómo exponer los elementos hallados.
Mikel Ramos señalaba que se desconoce cuál podía ser el uso concreto que podía tener esa sala, aunque recuerda que el castillo -en realidad un palacio- tenía una función eminentemente residencial.

Este revestimiento cubre aproximadamente la quinta parte del total de la sala, que tiene en total casi 22 metros de largo por 8,8 de ancho y estaba oculto bajo 500.000 kilos de escombros que han sido retirados en las últimas semanas.

Bajo la sala azulejada se encuentra la bodega, que ha sido ya limpiada y en uno de cuyos laterales se pueden ver unos espacios en los que, probablemente, se guardaban las cubas. La bodega tiene dos agujeros en su techo, uno de ellos antiguo, y que había sido reparado antiguamente, y otro provocado por la caída de una gran piedra, probablemente durante el bombardeo del castillo en las guerras civiles del siglo XV.

Fuera del recinto del palacio, las excavaciones están sacando a la luz otras estancias, como las cocinas, en el lado este (hacia las canteras) o las letrinas, en el oeste del castillo.

Teobaldo II construyó el castillo en torno a 1260, en un momento en el que el obispo de Pamplona ocupaba el palacio real de la capital navarra. Su hermano y sucesor Enrique I y Carlos II, ya en el siglo XIV, también habitaron el palacio, que también sirvió para custodiar el tesoro del reino, como depósito del archivo de la Cámara de Comptos, del Archivo Real y de algunos documentos del obispado. En 1378 fue destruido por las tropas castellanas.

Reconstruido por Juan II en torno a 1445, volvió a sufrir daños importantes en las guerras civiles, en 1449 y 1494, y también parece que fue incendiado en el entorno de la batalla de Noáin, en 1521. Quedó abandonado definitivamente alrededor de 1640; vuelve a aparecer en la historia durante la Guerra de la Independencia, con enfrentamientos entre las tropas de Espoz y Mina y las francesas, y también en las guerras carlistas.

12 agosto 2009

Los arqueólogos de la villa medieval de Ifach localizan estructuras domésticas y comunales en el recinto amurallado

Publicado en Grupo Noticias

El Alcalde y el Director del MARQ visitan los yacimientos de Ifach y de los Baños de la reina que serán objeto de una exposición en el museo en diciembre.

A penas unos días después de sacar a la luz la clave de la bóveda de la capilla de la iglesia de la villa medieval de Ifach, los arqueólogos del MARQ que participan en la V Campaña de excavaciones en la zona han cumplido un nuevo objetivo: encontrar estructuras domésticas que demuestren que la villa medieval estuvo poblada.

Esta mañana el Alcalde de Calp, Ximo Tur, y el Director Técnico del MARQ, Manuel Olcina, han visitado el yacimiento y han escuchado las explicaciones del Director del Proyecto, José Luís Menéndez, que ha destacado el descubrimiento de la clave de la bóveda de la capilla sur de la desaparecida iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles y el reciente descubrimiento de estructuras domésticas colectivas y de almacenaje, además de calles y otros elementos de urbanismo medieval.

Estas estructuras, posiblemente de carácter residencial, serán estudiadas en profundidad en las próximas campañas que el MARQ tiene previsto llevar a cabo en este yacimiento que se ha desvelado como de los mejor conservados de la Comunidad Valenciana ya que se ha mantenido sin apenas alteraciones.

La pobla medieval de Ifac fue fundada en 1298 y destruida en 1359, la iglesia fue construida entre 1320 y 1340 por Margarita, Condesa de Terranova e hija del almirante Roger de Llùria, fundador de la villa. La iglesia es el edificio emblemático del yacimiento y presenta una anchura de más de 10 metros y una longitud de unos 30 metros.

Tras la visita al Peñón el Alcalde y el Director del MARQ se han desplazado al yacimiento de los Baños de la Reina donde la Directora de Campo de Voluntarios que está excavando en la zona ha explicado las novedades de la presente campaña.

La Directora, Ana Ronda, ha comentado que se está trabajando en el área que conecta las termas con la casa principal, la domus de principios del siglo IV, y ha anunciado que “se ha descubierto que el yacimiento tuvo una actividad frenética a lo largo de todos los siglos que estuvo habitado porque los elementos se reciclan y reutilizan, cuando las termas dejan de usarse como tal pasan a tener un uso industrial”.

Las visitas han servido también para que el Alcalde, Ximo Tur, y el Director Técnico del MARQ, Manuel Olcina, concretaran aspectos de la exposición que se celebrará el próximo mes de diciembre en el MARQ sobre los dos yacimientos calpinos. Ya se ha anunciado que cada yacimiento contará con una sala propia y que además de mostrar las piezas descubiertas en las últimas campañas recurrirá a audiovisuales y representaciones virtuales.