09 octubre 2007

La Vila Joiosa inicia una investigación arqueológica sobre su castillo medieval

Publicado en Levante

Levante de Alacant, la Vila Joiosa El Área de Arqueología del Ayuntamiento de La Vila Joiosa iniciará la próxima semana una investigación sobre el castillo medieval de la localidad con el fin de recuperar y conservar los restos de esta antigua fortaleza, según informaron ayer en un comunicado fuentes municipales. Los trabajos serán dirigidos por los arqueólogos municipales, Antonio Espinosa y Diego Ruiz, con el objetivo de realizar unos sondeos que permitan determinar los restos que quedan de este emplazamiento medieval, así como de planificar una futura excavación en extensión que permita su recuperación y puesta en valor. Los trabajos de excavación permitirán además dar a conocer qué restos del castillo quedan en pie en el solar que hasta ahora acogía el Colegio Público El Castell, que desde este curso escolar ya no se encuentra en uso.

Desde el citado castillo «se organizó la lucha anticorsaria de toda la Marina Baixa durante siglos», según informaron las mismas fuentes que explicaron que «La fortaleza se construyó en el siglo XIV, cuando se erigió la vila nova», que en aquel entonces «se hallaba en la frontera rodeada a un lado de poblaciones moriscas y a otro de señoríos de la Orden castellana de Santiago». La ciudad, sus murallas y su castillo «desempeñaron un papel fundamental en la defensa de las costas valencianas», destacaron.

Históricamente ésta «fue una de las plazas mejor artilladas del reino», tal como señalaron fuentes municipales, principalmente «en la defensa anticorsaria durante los siglos XVI a XVIII, cuando se multiplicaron los ataques berberiscos a las costas mediterráneas españolas». La Vila Joiosa «fue una de las ciudades más famosas durante la Edad Moderna en el Mediterráneo por su papel en la prevención y en la lucha contra flotas de piratas turcos y argelinos, que pusieron especial empeño en destruir sus defensas, lo que les abriría las puertas para atacar gran parte de la provincia» , según explicaron. Los propios vileros, en el siglo XVI, «fueron corsarios de renombre», añadieron. Además la ciudad fue también la sede de una de las tres compañías de caballería del reino asignadas a la lucha anticorsaria. Se conocen «numerosos datos sobre este importante castillo, gravemente dañado en diferentes ocasiones por episodios bélicos», explicaron desde el Consistorio. «Las reconstrucciones y refuerzo de la fortaleza fueron constantes», sin embargo, «el castillo quedó definitivamente en ruinas como consecuencia de la Guerra de Sucesión, a comienzos del siglo XVIII».

Los trabajos de excavación, que comenzarán la próxima semana, permitirán a los vileros conocer qué restos han llegado hasta nosotros - muros, torres, aljibes, fosos, etcétera - de un castillo «que fue esencial en la protección de las poblaciones de la comarca durante siglos, y cuyas trazas se han enmascarado por la construcción del colegio actual», según destacaron fuentes municipales.

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