06 octubre 2007

Las catas arqueológicas de la Casa del Copón sacan a la luz restos romanos y medievales

Publicado en La Rioja.com
M. Schmitt

Las definitivas catas arqueológicas en el solar donde se ubicaba la Casa del Copón, en Ruavieja, 21 ha desvelado diversos restos romanos que corroboran el inicio de la historia de Logroño, según explicó ayer el concejal de Patrimonio, Ángel Varea. Acompañado por el arqueólogo Pedro Álvarez Clavijo, el edil indicó que, además, se han hallado piezas medievales, del siglo XVI y de la época moderna, muchos de ellas relacionados con la historia del vino.

Varea comentó que el Ayuntamiento pretende integrar los restos en el futuro edificio, cuyo destino todavía está siendo estudiado por los responsables del Consistorio. «Cualquier hallazgo en el Casco Antiguo, lejos de ser un problema, es importante para este Ayuntamiento», subrayó el edil. En el solar, de 180 metros cuadrados de superficie, se hallaron distintas piezas, desde una cisterna romana -ubicada en la parte trasera de la parcela- hasta objetos de siglos medievales excavados en los estratos naturales. También se encontraron muros de mampostería que serían para aterrazar el solar en el siglo XVI, según explicó Álvarez Clavijo, con el fin de conseguir una superficie horizontal.

En el fondo de la parcela, el equipo encargado de las catas encontró una plataforma de prensa vinícola, que estuvo en uso en la edad moderna, y unos empedrados que pertenecieron a la ocupación del solar hasta 1928, cuando Fermín Álamo comenzó a construir la Casa del Copón. Se trata de unos empedrados similares a los conservados en la sede de la Universidad Popular de Logroño, en la calle Mayor.

Palacio o Santiago

Dentro de los rellenos arqueológicos aparecieron «abundantes» materiales de cartería desechadas de épocas históricas. Entre ellas, una basa con arranque de columnillas del siglo XVI, una moldura similar a las utilizadas en las iglesias de Palacio o Santiago. «Posiblemente era una pieza desechada para la obra de una casa de canteros», opinó el arqueólogo.

La cisterna, aclaró el especialista, apareció «aislada» con respecto a otros objetos romanos porque estaba excavada en el terreno natural. «Pero la tipología y la morfología del elemento no deja lugar a dudas de su atribución romana». Además, el relleno de la estructura aportó al equipo cerámicas romanas.

Con respecto a los restos medievales, los arqueólogos encontraron dos silos, uno de ellos de dimensiones «importantes», con un diámetro de tres metros. «Son elementos que hoy en día se convierten en basureros medievales», explicó Álvarez Clavijo. También se halló la base de un pequeño torco en uno de los muros del solar. El concejal de Patrimonio, Ángel Varea, aclaró que en la futura edificación se integrarán algunas de las piezas halladas durante las catas arqueológicas. Entre ellas, el depósito romano y la prensa vitivinícola. Asimismo, el edil aclaró que los elementos menores hallados serán también «rescatados» para «museizarlos».

Los trabajos se llevaron a cabo entre junio y agosto de este año, aunque en octubre del 2006 se hicieron las catas preliminares por Carlos López de Calle, que «fue el primero que puso el acento sobre la posible existencia de restos de época romana». Además, a partir de un rastreo de documentación histórica hasta el siglo XVI les permitió trabajar en un contexto.

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